Yo no lo podia creer
mientras se me ensombrecía el ceño
que en una cruz fuera a ver
a Cristo, mi Dios, mi dueño.
Una corona de espinas
le fué encajada en la frente
mientras por las cuatro esquinas
insultábale la gente.
Su túnica y sus ropajes
se sortearon los Romanos
mientras ofensas y ultrajes
a Dios hacían mis hermanos.
El cielo se oscureció
mientras la tierra temblaba
cuando mi Cristo murió
y su madre le lloraba.
Yá no pude soportar
poniendo todo mi empeño
a la cruz corrí a abrazar
desperté… todo fue un sueño.
Fin.
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